REFLXIÓN
SOBRE LA INERCIA
Cuando el tedio se acerca,
cuando la inercia no nos deja ver el sol
y nuestra sonrisa se queda contenida
como si nada más sea capaz de hacernos sonreír,
debemos dejar de parte nuestra sensibilidad,
debemos ir adentro de nosotros y meditar,
buscar nuestra razón, nuestra esencia,
y encontrar la belleza, la pasión,
la luz que nos ilumina por dentro
y es capaz de hacernos sonreír...
Orlando
Faias
Reservados
los derechos de autor – O. A. F. M.