EL BESO
No
interrogues al beso;
el beso son las palabras del alma,
viene desde adentro,
desde el afecto del corazón.
Siente solamente el beso,
el beso son las palabras del alma,
viene desde adentro,
desde el afecto del corazón.
Siente solamente el beso,
la
ternura, el amor del que besas,
el gusto de besar, el decir sin hablar,
donde yo leo que me amas
en las palabras de tu alma.
No me beses para que te bese
ni como un “toma allá da ca";
me besa con amor y por gusto,
como sin tiempo para recibir,
que yo tendré tiempo para besarte.
No me beses para que te ame;
me besa porque me amas,
sin la justificación del beso,
sin la revelación de las palabras;
el beso se define y revela por si
como yo te beso por gusto
el gusto de besar, el decir sin hablar,
donde yo leo que me amas
en las palabras de tu alma.
No me beses para que te bese
ni como un “toma allá da ca";
me besa con amor y por gusto,
como sin tiempo para recibir,
que yo tendré tiempo para besarte.
No me beses para que te ame;
me besa porque me amas,
sin la justificación del beso,
sin la revelación de las palabras;
el beso se define y revela por si
como yo te beso por gusto
en
la revelación del amor.
Orlando Faias
Reservados los derechos de autor - O. A. F. M.
EL BESO
ResponderEliminarNo interrogues al beso;
el beso son las palabras del alma,
viene desde adentro,
desde el afecto del corazón.
Siente solamente el beso,
la ternura, el amor del que besas,
el gusto de besar, el decir sin hablar,
donde yo leo que me amas
en las palabras de tu alma.
No me beses para que te bese
ni como un “toma allá da ca";
me besa con amor y por gusto,
como sin tiempo para recibir,
que yo tendré tiempo para besarte.
No me beses para que te ame;
me besa porque me amas,
sin la justificación del beso,
sin la revelación de las palabras;
el beso se define y revela por si
como yo te beso por gusto
en la revelación del amor.
Orlando Faias